domingo, 28 de diciembre de 2014

Sobre el conflicto en México y una critica al entorno anarquista.

Actualmente corren tiempos de fuerte tensión en parte del país, el descontento que  individuos y grupos tienen contra el Estado-Capital se ha venido extendiendo, creando así un contexto idóneo para continuar con nuestras luchas por la libertad total. Vivimos en una pretendida “democracia”, en la que sus representantes se empeñan en redoblar esfuerzos para consolidar una inexistente “paz social”, que en la práctica no es otra cosa que mayor control y dominio sobre nuestras vidas. Pero este mismo control es lo que genera odio y resentimiento que tarde o temprano estallarán en revueltas.

Podemos ver que estamos frente a un gobierno que se ha sentido vulnerable y al que le duele verse momentáneamente superado ante la acción de aquellas y aquellos que combaten su opresión, y al que le llena de terror que el conflicto se generalice para dar paso a la insurrección social.

A lo largo y ancho del país hay decenas de asesinatos e injusticias, de casos aislados que no tienen el apoyo mediático ni la fuerza social para provocar la indignación que abra el conflicto, lo cual nos hace pensar que seguimos prefiriendo lo espectacular y cuantitativo. 

El conflicto más reciente en ese sentido es el caso Ayotzinapa, mismo que ha sido detonante para una serie de disturbios que se han suscitado en diferentes puntos del país a raíz de la desaparición de 43 estudiantes  normalistas, decisión tomada desde las esferas del poder gubernamental, lo cual nos demuestra que la guerra sucia no es cosa del pasado, sino que sigue siendo una práctica que prevalece como lo demuestra Chiapas, Atenco, Oaxaca.

Ríos de información corren diariamente sobre los desmanes del ya manoseado tema de Ayotzinapa en donde se especula sobre el destino incierto de los jóvenes, así que de momento solo puedo decir que la desaparición de los 43 estudiantes se da en un contexto complicado  en el que intervienen varios factores que contribuyeron a que se suscitara la situación: las disputas  entre carteles de la droga que operan en la zona  por el control de la plaza de la amapola y la mariguana quienes ven en el tráfico de droga un medio para adquirir no solo armas y dinero, sino poder y prestigio para la realización de sus objetivos. 

Mezclado esto con el tema de la política, pues como bien sabemos, los representantes de la democracia están coludidos con las mafias para aumentar su poder político y económico, formándose así un narco-gobierno. Además de la presencia histórica de grupos político militares que tienen su base social en esa región.

Nosotros, individualidades contrarias a toda forma de autoridad no podemos aceptar ningún poder visible ni de facto, asimismo, mostramos nuestra rotunda negación a cualquier tipo de asesinato o desaparición por motivos políticos o intereses mafiosos.

La desaparición de los 43 normalistas ha tenido bastante eco dentro de la opinión pública y en medios masivos de comunicación, creándose así el movimiento “Todos somos Ayotzinapa” y desencadenando una ola de manifestaciones  en protesta, mítines con emotivos discursos, criticas en internet a las instituciones del Estado por su “ineficiencia”; grupos ciudadanistas pidiendo la renuncia del fascista Peña Nieto; familiares y amigos exigiendo la presentación convida de los suyos y llevando gran parte de la lucha por la vía de la legalidad, pero también mediante formas violentas, sobre todo en Guerrero y el Distrito Federal.

En lo personal, me solidarizo con el dolor que sin duda los familiares de los desaparecidos deben sentir, pues no es nada fácil la situación por la que ahora pasan, y que clamen a las autoridades por justicia me parece obvio al no tener una postura ácrata. Y si bien entiendo, aunque no comparto, que la mayor parte del movimiento prefiera manifestarse de manera pacífica y no violenta, lo que no puedo aceptar es que ese mismo movimiento, o parte de él, señale e incluso entregue a compañeros que deciden apoyar desde métodos ilegalistas.

Desde mi perspectiva anarquista, considero que el pacifismo es una lucha fácilmente recuperable por el Estado, además de ser opuesto a nuestros principios. Nosotros no pretendemos cárcel para nadie, pues más bien luchamos por la destrucción de las prisiones, pues las consideramos inútiles. Para el anarquista, desenvolverse en esta sociedad no requiere ninguna realización, sino más bien es una constante tensión que buscamos extenderla en todos los ámbitos de nuestras vidas, por eso debemos ser cuidadosos con nuestros posicionamientos y saber llevar una lucha al lado de aquellos que se rebelan pero sin dejar nuestras convicciones, sin buscar ser aceptados ni agradables, ni mucho menos buscar reconocimientos.

Por ejemplo, apoyamos la revuelta surgida a raíz de Ayotzinapa pero no caeremos en métodos y formas ajenos a nosotros para ser arrastrados por la corriente. No todos somos Ayotzinapa. Nosotros acudimos para ampliar el conflicto sin ponernos la camisa de un movimiento que no nos representa. Coincido con el compañero Mario López “Tripa” en que nuestra lucha no es por buscar mejoras ni para volver al gobierno más justo, no concebimos ningún mal o buen gobierno,  no buscamos desenvolver nuestras luchas en un rollo “buena onda”. Buscamos más bien una ruptura total, un Ai ferri corti con toda manifestación de dominio, venga de donde venga, una ruptura hasta las últimas consecuencias.

No buscamos pedir nada a nadie, solo aprovechar las condiciones para continuar nuestras luchas, ya que cada golpe asestado al poder nos va haciendo más libres. Creemos con firmeza que los ataques solidarios son la mejor forma de mostrar nuestro apoyo. No creemos en las coyunturas para demostrar nuestra solidaridad, sino que deseamos y nos esforzamos por llevar a la práctica la insurrección cotidiana y social.

Estar preso suele ser duro, además de que reduce bastante la cantidad de información que uno recibe sobre los acontecimientos del exterior, pero esto no limita que podamos emitir nuestras reflexiones, a pesar de la impotencia por no tener oportunidad de estar apoyando codo a codo a los compañeros, cuando vemos que las condiciones se prestan para realizar esta insurrección a la que me refiero, por cierto, el momento que muchos anarquistas tanto dicen esperar, como pregona el anarquismo de síntesis o aquellos ”revolucionarios antisistema” que se jactan de buscar un mundo mejor, pues bien, en estos momentos no pueden poner pretextos para salir de esa eterna espera y brincar de la zona de comodidad que da la palabra por si sola. De lo que se trata ahora es de continuar con la tensión y no permitir que se extinga el fuego liberador. Debemos seguir avanzando, no solo alzando el puño y la voz, sino echando todo el cuerpo y voluntad, teniendo claro que si no hay una aglomeración y compañeros para actuar, tenemos la valiosa opción de continuar con ataques con la complicidad de la noche y el anonimato, con artefactos caseros y sencillos pero contundentes, objetivos tenemos de sobra.

Sin embargo, la vanidad y el capitalismo suelen ser factores que distorsionan lo que es la solidaridad, al confundirla con acciones banales cómo ir a un juego de futbol o conciertos musicales, buscando salir en la foto y ser famoso por un instante, o bien sentir un gran coraje momentáneo por escuchar a un artista o intelectual lanzar un discurso barato y aplaudir fuertemente para después regresar a sus casas y seguir con la vida rutinaria.

O aquellos que demuestran su apoyo comprando una playera con algún pequeño texto, sin tener claro que con eso en vez de apoyar la lucha solo apoyan a la industria capitalista. Y así podríamos mencionar más ejemplos…pero eso no pasa  entre anarquistas… ¿o sí?

Tengo claro que la insurrección debe ser social, a lado de la gente, incluso con diferente ideologías, partiendo de que la lucha debe ser generalizada y buscando una satisfacción individual, pero eso no quiere decir que estemos en busca de alianzas con nadie, pues como bien dice Bonnano: “los anarquistas somos extraños a todo tipo de alianzas”. Considero esa unión solo momentánea y en pro de ampliar el conflicto y no solo mermar al Estado, sino destruirlo de fondo. Por ello mi discrepancia con las alianzas, pues suelen ser imposibles debido a las discrepancias de principios.

Un ejemplo de estas discrepancias es el EZLN, donde se muestra una evidente contradicción, pues un montón de anarquistas, o anarcozapatistas, de supuesta postura antiautoritaria, apoyan y se sienten identificados con este ejército, de tendencia comunista y de estructuras autoritarias. Estos anarcozapatistas se ven influenciados por consignas como “mandar obedeciendo”, pues bien, nosotros decimos que el mandar siempre genera poder, y en consecuencia siempre habrá alguien que deba obedecer, aunque los mandos zapatistas se empeñan en decir  que “es el pueblo quien manda y el gobierno quien obedece”.  Por supuesto que no niego ni desconozco la lucha que en 1994 dio con valor el EZLN contra el Estado, ganando cientos de simpatizantes en el mundo para su causa; incluso a varios anarquistas nos llegó a cautivar con la “Sexta Declaración de la selva lacandona”, pero el desencanto vino pronto al darnos cuenta que su práctica autoritaria continuaba existiendo, a pesar de su supuesto libertario.

Cualquier ejército por más revolucionario que pueda decirse, incluso ejércitos negros  que supongan reclamarse anarquistas, siempre tendrá bases autoritarias (maoistas o marxistas-leninistas), las cuales son contrarias al anarquismo y por ello considero superfluo y estéril buscar esas alianzas. Vemos necesario un distanciamiento con el izquierdismo que busca derrocar al poder solo para imponer enseguida otro, clásica teoría marxista-leninista.

Para concluir no queremos dejar de mencionar que en la actual coyuntura diferentes grupos han desplegado actividad, anarquistas, grupos políticos y ciudadanistas e incluso guerrillas han contribuido con acciones por separado al conflicto y como siempre, hay quien busca sacar beneficios de ello, como es el caso de una guerrilla que se ha dado a la tarea de reclutar gente, incluso a algunos anarquistas, para ampliar su círculo guerrillero. Prometen entrenamiento en estrategias militares y lógicas de ataque, manejo de armas. Es preocupante que algunos anarquistas se dejen seducir y accedan a participar, yendo así en sentido contrario de las convicciones, o tal vez es  falta de información. Las guerrillas son vanguardias especialistas que han aceptado la clandestinidad voluntariamente como forma de ataque.

Debemos tener claro que no es necesaria la especialización en nada, pues no somos profesionales ni buscamos serlo, solo nos valemos de ataques sencillos y permanentes, usando solo lo necesario para hacer efectiva la lucha, pues el fin no justifica los medios  y nunca debemos perder la coherencia entre quienes somos y cómo y por qué realizamos nuestros  actos.


Carlos López “Chivo”

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Fuera Peña Nieto y Que se Vayan Todos! ¿Y luego qué?


 "El Estado es una condición,

una cierta relación entre seres humanos,
una forma de comportamiento humano;
que destruimos estableciendo otras relaciones,
 comportándonos de manera diferente,
con uno y con el otro”

 Gustav Landauer.


El actual régimen es insalvable, la situación política, económica y social que hoy vivimos lejos de aligerarse tenderá a la agudización. En resumen, la democracia ha fracasado, en su lugar los gobiernos lejos de buscar el bienestar de todos consolidan el despojo; la represión; el enriquecimiento de pequeñas minorías: el empobrecimiento de los más; el control de la información por monopolios informáticos; el deterioro ambiental; los asesinatos; el tráfico de drogas; las desapariciones forzadas, los feminicidios; los robos; etc.

En este contexto el estado de derecho es inexistente, solo sirve de discurso para encubrir las canalladas del poder. Lo que realmente tenemos en México es un estado policiaco y extremadamente militarizado; donde gran parte del presupuesto se utiliza para equipar y armar unos cuerpos de seguridad que constituyen la columna vertebral del crimen organizado y la represión a la disidencia.

A raíz de esto, millones nos hemos lanzado a la lucha, hoy por todo el país se ha prendido la llama de la rebelión contra las instituciones y el gobierno, y por todos lados se escucha el grito de ¡Fuera Peña Nieto! y ¡Que se Vayan Todos!

Pero de lograr la caída del régimen ¿luego qué?, ¿volveremos a dejar todo en manos de unos cuantos?, en lugar de Peña ¿dejaremos que otro partido político, otro político más nos gobierne?

Podemos decir que el famoso “ya me canse” ha pasado a ser una crítica de nuestra vida como simples espectadores. Ya que mientras los días se consumen en el trabajo o en los libros, en el estrés de vivir sin un sustento estable, o en el aburrimiento de una sociedad plastificada y mercantilizada; otros sea han apoderado del control sobre la vida de las mayorías y regatean los recursos para vivirla con calidad, manteniéndonos simplemente como el burrito de la zanahoria que hace trabajar este sistema.

Coincidiremos en la opinión de que todos los partidos políticos han fallado, y que por ello la vía electoral esta cancelada. Estaremos de acuerdo de que estos solo son una de las muchas formas en que los de arriba viven a costa de las mayorías y en que, generalmente, utilizando pequeñas minorías de electores que compran con migajas, estos siempre se ponen de acuerdo para que ganen los mismos.

La pregunta del millón -en estos momentos que se ocupan de grandes cambios- sería, donde están los grandes jefes sindicales; donde están los grandes líderes sociales; donde están los López Obrador; donde están los partidos de la llamada izquierda “revolucionaria” y “democrática”; donde los MORENA, PT y Movimiento Ciudadano; donde están las masas que dicen mover esos líderes de colonia afiliados a los programas sociales y los partidos; donde están los estudiantes universitarios “progres” que salieron a manifestarse por cientos los primeros días de desaparecidos los compañeros normalistas.

Lo más probable es que estén esperando las elecciones, esperando las despensas, esperando hacer las negociaciones pertinentes que les permitan seguir enchufados del sistema político o en espera del próximo tema de moda en la protesta (trend topic). O simplemente muchos de ellos desilusionados porque el descontento no se ajustó a los límites de las flores y las instituciones salieron despavoridos ante la audacia de los manifestantes mal portados. Es que si ellos querían controlarnos o quieren ser la próxima clase dirigente también se tienen que ir, no les necesitamos.

Curiosamente todos estos partidos y personalidades que se creen jefes por obra de su verborrea, siempre nos recomendarán esperar, siempre dirán que no realicemos lo que ellos consideran acciones desesperadas. Ellos dominan el escenario político y la tribuna, negocian a espaldas del movimiento y es por eso que ese no es nuestro terreno.

Por el contrario, nuestra apuesta es construir un movimiento desde abajo basado en la acción directa contundente, que significa que todos contribuiremos de manera activa y directa en la protesta; y en la desobediencia civil irrespetuosa como modo de impulsar la propia actividad y la iniciativa de todos y cada uno. Nuestra lucha no es por el pueblo, sino con el pueblo, porque somos los de abajo y en nosotr@s está impregnado el espíritu libertario de nuestra gente.

De que nos serviría construir más caudillos, de que nos serviría tener nuestros jefes políticos, eso solo hablaría de la falta de capacidad política para afrontar el conflicto social que vivimos. En este sentido de no constituir un movimiento desde abajo con conciencia de causa y de la actividad que realiza, solo estaríamos dando pie a que a que un nuevo gobierno desde arriba se imponga.

Lo que verdaderamente ocupamos es empezar hacernos cargo de nuestros propios asuntos de lo que nos compete como comunidad, auto organizarnos para volver a tener el control sobre nuestras vidas y sobre los recursos de nuestra localidad, para que los “muchos” sean los que manden y no unos cuantos que entregados a la corrupción vean por sus propios intereses y no por el bienestar común.

Si queremos autogobernarnos la apuesta debe ser entonces saber cuáles son nuestros intereses y necesidades comunes para organizarnos desde acá abajo. Es necesario extender y generalizar la lucha por justicia a los compas de Ayotzinapa y a todos los desparecidos, pero también para que no aumenten las tarifas del camión, para que empresas como SuKarne o la CFE dejen de contaminar y de despojar a los colonos y ejidatarios y, en fin para construir la comunidad que queremos para nosotr@s.


Hoy que la rabia y el descontento proliferan es el momento de organizarnos solidariamente en las escuelas, en los centros de trabajo, en las zonas comunes como barrios o fraccionamientos, con los amigos, con los familiares, en fin con quienes compartimos intereses comunes. En todos estos lugares, debemos crear las brigadas de información necesarias para articular las luchas y las resistencias, debemos crear los comités de lucha que permitan que todos aquellos que comparten nuestro sentir rebelde se solidaricen en la acción y para que sepan que hay otros que como ellos quieren vivir su vida con dignidad.

El movimiento por Ayotzinapa y para que renuncien los gobernantes es muy amplio, es hora de tener un arraigo de base y articular el movimiento desde abajo para que cuando echemos al gobierno, a los políticos y a las instituciones antidemocráticas y corruptas podamos sustituirles con nuestras propias formas de organizarnos lejos de la política electorera y corrupta, lejos de la izquierda y la derecha, porque más allá de las ideologías somos los de abajo y vamos por los de arriba.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

ENCAPUCHAD@S Y SIN VIOLENCIA II



Ya lo sabiamos

Pero, ¿si no es hoy,cuando?

Si no es así, no será de otra manera.

Sin líder, dirigencia, ni partidos, un grupo de maniestantes  irrumpimos en las instalaciones de TELEVISA Mexicali el 1 de Diciembre, en el  marco de las protestas nacionales e internacionales por la desaparición de los 43 normalistas, exigiendo la renuncia de Peña Nieto.

Este grupo que logró irrumpir en las instalaciones de Televisa estaba conformado por amas de casa, madres y padres de familia que acudieron con sus hij@s, estudiantes de distintos planteles y niveles educativos, egresados de la UABC y normales.

Con el rostro cubierto por un pañuelo blanco con el numero 43 y la leyenda “vivos se los  llevaron, vivos los queremos” irrumpimos el monopolio televisivo. Este paliacate lo hemos usado desde que comenzó la rebelion por los 43 estudiantes desaparecidos, este palicate es una remembranza por las 43 voces que quisieron acallar con saña y violencia los policias y el narco del municipio de Iguala, este paliacate es el que cubre el rostro que le fue arrancado a Julio César Mondragón; nunca vamos a olvidar a esas 43 voces calladas y ese rostro arrancado, con ese palicate los llevamos en cada manifestacion, ese es el ícono de nustra lucha.

Sin lanzar un solo golpe, o piedra ,sin romper niguna ventana o rayar ningun muro, el grupo entró hasta los foros dee Televisa Mexicali donde transmiten sus noticieros, l@s manifestantes exijimos un espacio en vivo para leer un mensaje a lxs ciudadanxs, la respuesta de los empleados de televisa fue la total negativa. Los manifestantes entonces, nos negamos a sair del estudio hasta que se transmitiera el noticero en vivo para tomar un espacio y enviar nuestro mensaje. Despues de llenar sus instalaciones de policias, ministeriales y otros agentes, los empleados de Televisa ofrecieron transmitir un mensaje de 5 minutos en tres de sus noticieros.

Nuestro grupo se dividió, una parte de los manifestantes queria acceder a la propuesta de los empleados de Televisa, el resto del grupo optaba por quedarse en el foro hasta el noticero en vivo. Para evitar divisiones l@s anarquistas accedimos a tomar la opción de los cinco minutos en tres noticieros, para que no engrandecer la división.

Ya lo sabiamos, los empleados de televisa NO dieron el mensaje completo de cinco minutos en sus tres noticieros,rompiendo con el acuerdo.

Ya lo sabiamos también, a pesar que ningun manifestante uso la violencia, RADIOPATRULLA, TELEVISA Y OTROS MEDIOS HAN EMPRENDIDO UNA CAMPAÑA DE CALUMNIAS, REPITIENDO LA CONSIGNA DICTADA DESDE LOS PINOS: “LOS MANIFESTANTES SIEMPRE  SON LOS VIOLENTOS”

¡LA PRENSA MIENTE!

¡PEÑA NIETO ES EL DELINCUENTE!

¡TELEVISA TE IDIOTIZA, TV AZTECA TE APENDEJA!

¡LOS ASESINOS ESTAN EN LOS PINOS!

¡EL PUEBLO UNIDO NO ES VIOLENTO, PERO TIENE TANTO PODER,QUE NO HAY PUERTA QUE NOS DETENGA!

¡HOY COMO AYER, NOS MANTENEMOS FIRMES Y EN RESISTENCIA CONTRA EL ESTADO, EL CAPITAL Y SU VIOLENCIA!

El siguiente es es el link que los empleados de televisa se comprometieron a transmitir sin censura a cambio de la retirada de los manifestantes de las instalaciones de noticieros televisa, acuerdo que no cumplieron.

A continuación les reproducimos el mensaje original leido dentro de las instalaciones de TELEVISA:

Estimado televidente, ciudadano conectado a esta pavorosa y ruin máquina de sueños, hoy te hablamos para decirte que México Ya Despertó. Si aún no te habías dado cuenta, por el circo montado por la muerte de Chespirito, hoy 1ero de Diciembre del 2014, se extiende por todo el país una rebelión contra el régimen de Peña Nieto, contra las instituciones, contra todos los partidos políticos y contra todos sus cómplices, entre quienes esta Televisa.

Por años, estos medio de comunicación ha sido uno de los pilares del despotismo que ha vivido nuestro país por más de 70 años, de cierta forma ellos han contribuido en esta destrucción que se extiende por más de 500 años de colonización, opresión y servidumbre.

Cínicamente a su alianza con el priismo, le han llamado la dictadura perfecta, una verdadera teletirania que incluso llega a confundir sobre quiénes son los que realmente gobiernan al país. Por mucho tiempo, han contribuido al control mental del pueblo, a su división, nos han adormecido con novelas, estúpidos programas y sus mentiras a medias a las que llaman noticias.

Sabemos que empresas como Tv Azteca y la propia Televisa son además grandes prostíbulos que colocan a prostitutas damas de compañía al lado de políticos, con el fin de sellar una alianza que asegure las ganancias para las televisoras y las mafias de poder.

Tal vez te preguntes, porque si repudian a Televisa este les ofrece un espacio. No te confundas televidente, no estamos aquí para pedir que se humanicen los medios, no estamos aquí para pedir que se democraticen como otros ingenuos mendigaban. Estamos aquí, porque el pueblo de Mexicali organizado ha decidido ocupar las instalaciones de televisa y mandar este mensaje de repudio contra el estado asesino, contra el gobierno, los partidos y contra los medios masivos de comunicación.

No queremos su democratización, queremos que desaparezcan, ya que es impensable que en un país como el nuestro, el 70% de los mexicanos vivan con alguna situación de pobreza, mientras los dueños de estos medios, acumulan riquezas sin cesar y extienden sus tentáculos a casi todas las actividades comerciales que se desarrollan en México.

No podemos más que llamar a televisa como lo que es, un cruel monopolio que gobierna a este país en alianza con otros capitalistas de México y el extranjero.

Hoy Peña Nieto que gobierna para todos los de arriba, ha puesto todos los aparatos policiacos y militares al servicio de los ricos, mientras el pueblo con su digna rabia grita ¡Ya Basta!, ¡Que se vayan todos los políticos, funcionarios, gobernantes, empresarios e instituciones que han contribuido a la miseria del pueblo mexicano!

Conciudadano, sabemos que tanto lavado de cerebro no puede sino desembocar en miedo y conformismo; sin embargo, sabemos que muchos ya cambiamos y que lucharemos por un país mejor, donde no existan parásitos que se alimentan del pueblo. Es por eso que te anunciamos que una revolución se avecina, una revolución de conciencia, de la vida cotidiana, una revolución social. Y te advertimos que esta revolución no será transmitida por televisión, ellos la trataran de callar, desvirtuar y ocultar, como ya lo están haciendo; pero la verdad ya no podrá sernos arrancada por la soberbia de los poderosos.

Ya somos miles y miles de mexicanos que de muchas formas y maneras nos hemos lanzado a la lucha contra el mal gobierno y los ricos, si tu estas harto de las canalladas y bandidajes que se cometen en este país entonces apaga tu televisor y sal a las calles a organizar y luchar por el cambio que todos necesitamos.



Desde Televisa Mexicali…. Coordinadora de Lucha Mexicali por Ayotzinapa….

martes, 2 de diciembre de 2014

¡Fuera peña!… ¡Que se vayan todos!… ¡No más gobiernos, ni líderes baratos!...


Cuando gritamos ¡Fuera Peña! y ¡Que se vayan todos!, no es para echarlos del país solamente, no es para que se vayan ellos y vengan otros supuestamente más patriotas o demócratas. No, no lo hacemos para que venga un gobierno más benevolente; no lo hacemos para que vengan los señores de la ambigüedad y la reforma a gobernarnos.
Si gritamos ¡Fuera Peña!, no es para que en su lugar se coloque algún politiquillo de las distintas facciones que hoy se suman a la lucha popular; no es para que se engrandezca la izquierda o la derecha, alguna organización, o alguna de esas propuestas que vienen de la intelectualidad en forma de nuevas leyes; sino para que el pueblo sea el que mande.
Cuando gritamos ¡Fuera Peña!, gritamos nuestra aversión al gobierno mexicano, al estado que nos ha asesinado, que se arma para defender el despojo de los de arriba y combatir a los de abajo que se rebelan.
Cuando gritamos ¡Que se vayan todos!, no es para que vengan unos nuevos; no es para que haya una nueva generación como clase dirigente, sino para echar de nuestras vidas la lógica que dicta que unos tienen que gobernar y otros tienen que ser gobernados.
El grito de ¡Fuera Peña!, y ¡Que se vayan todos!, es la memoria de los vivos de Ayotzinapa; pero es también, la memoria indómita de una tradición de más de 500 años de lucha y resistencia contra la tiranía y la servidumbre que desde arriba nos han querido imponer. 
Sabemos que muchos se han montado en esta lucha para tratar de dirigir; su pensamiento vanguardista les nubla el pensamiento y les hace ver enemigos en el propio pueblo que no los acepta como líderes.
Muchos de ellos se irán tras otra rebelión como si esta fuera cuestión de moda, como buenos activistas siempre están más atentos a la agenda política, que a la construcción de un mundo nuevo.
Por el contrario, nuestra lucha es por hacer salir de nosotros el policía, el gobernante, el delator, el comerciante usurero que llevamos dentro, es hacer un cambio de mentalidad; de la mentalidad de estado, de la mentalidad mercantilizada y consumista.
Cuando nos lanzamos a la lucha no es para imponer y representar a otros, sino para encontrar cómplices con quienes compartir nuestra rabia y deseo de otra forma de vivir. Nuestra lucha es también  por los compas de Ayotzinapa, es por los ejidatarios contra la CFE, es por democracia universitaria, contra el gobierno y el despojo, es por la tierra toda; pero no para encontrar un espacio desde donde administrar algún tipo de poder, sino para hacer saltar por los aires la iniquidad y las estructuras de dominación.
Y si en el camino tenemos que hacerlo, entonces que no quede piedra sobre piedra.


viernes, 7 de noviembre de 2014

Otras Palabras de compañerxs leídas en el meeting despues de la marcha del 5 de Noviembre del 2014 en Mexicali.



Hola!, Soy integrante de un grupo de profesionistas preocupados y ocupados por combatir el rezago educativo en Mexicali y lamentablemente tan solo por esta razón también somos una piedra en el zapato de un gobierno que nos quiere ciegos, sordos y mudos ante las atrocidades de este país. Siento dolor en mí porque sé que hoy somos menos 43 luchando por el mismo objetivo.

Quiero decirles que no me puedo presentar como Ayotzinapa pues en lo personal, ya no soy estudiante, soy egresada de una universidad que de pobre no tiene nada, no soy indígena, tampoco hombre, Soy mestiza y mujer con todo lo que social y culturalmente implica, si bien mis padres son del centro del país, nací aquí en el norte sin embargo aunque yo no sea una estudiante de una normal rural símbolo de rebeldía, ni una madre a la que le han arrancado a su hijo, me solidarizo porque he aprendido que no necesito visualizar a los que sienten dolor por una muerte o incertidumbre ante la desaparición de un ser querido, como parte de mi familia o círculo cercano para indignarme y sentir rabia. No seré de Ayotzinapa, pero si me siento convocada por el dolor de esas madres y padres firmes en su dignidad y en su clamor de justicia, eso es lo que me tiene aquí y quiero hacerle saber a cada una de las familias que hoy lloran y luchan por encontrar vivos a sus hijos desaparecidos por el cinismo gubernamental que no están solos, que en Mexicali también nos sumamos a su exigencia y que a ellos los sumamos a las nuestras, pues aquí no estamos tan en paz como quieren hacernos pensar. En BC también pasan atrocidades a diario, oficialmente, la estadística de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Baja California indica que del 1 de enero al 30 de octubre de 2014 se denunciaron 34 secuestros, de esa cifra, 26 ocurrieron en Tijuana; sin embargo, deben sumarse las 326 privaciones de la libertad también denunciadas hasta el 30 de septiembre, de las cuales 141 tuvieron lugar en Tijuana, 91 en Mexicali, 57 en Ensenada, 22 en Rosarito y 15 en Tecate. Tenemos también violaciones sexuales de funcionarios públicos a adolescentes, preguntémosle a El ex dirigente burócrata, José Luis Parra Vázquez, Mujeres utilizadas como monedas de cambio para comprar plazas, y En lo que va del año,  se han registrado 643 asesinatos en todo el Estado de Baja California.  y tantas cosas terribles que se quedan impunes… No nos quieran jugar el dedo en la boca de que Mexicali es progreso, que aquí no pasa nada, que eso pasa solo en Guerrero, allá solamente en el sur,  En realidad todo México está sufriendo las consecuencias de este mal gobierno, terrorista y autoritario, de este estado fascista y además aliado con el narco.

La delincuencia que se da en todos los niveles de esta sociedad no nos deja vivir en paz, nos divide porque nos provoca desconfianza hasta del vecino, del compañero de trabajo, del paisano, del migrante, de nuestra hermana, de la señora que vende dulces en la esquina. Mexicali, despierta!! Eso es lo que ellos necesitan para seguir imponiendo a diestra y siniestra sus políticas de despojo y represión. Esta es nuestra oportunidad de comenzar a dialogar con nuestros vecinos, con nuestros hermanos y hermanas. El EZLN nos ha mostrado otra forma de organización, de gobernar, de luchar esa forma es mandar obedeciendo, caminar preguntando, valorando la palabra, el diálogo para convencer y no para vencer a los compañeros y a las compañeras, esa es una gran lección que necesitamos aprender en nuestro diario actuar, al entregar un volante, al decidir nuestras siguientes acciones, al invitar, simplemente en el caminar diario. En lugar de dividirnos, necesitamos unirnos, y no culpándonos entre nosotros mismos. Es hora de ORGANIZARNOS, en nuestros barrios, colonias, en nuestro trabajo, en nuestras familias, y crear juntos nuevas formas de convivencia, unas más justas, organizarnos para crear un mundo donde quepan muchos mundos, donde por cierto no caben los partidos políticos, así que exigimos que se vayan todos! Duele tanto, tantísimo como tantas cosas duelen en este México, que ellos, el mal gobierno intente reírse de nosotros una vez más, sabemos muy bien que los 3 niveles están implicados en los crímenes que se han cometido contra estos jóvenes futuros maestros de campesinos y pueblos indígenas, pues su represión ha sido sistemática, ¿su objetivo? entregar el territorio nacional a extranjeros, que les quede bien claro, esto no es un hecho aislado. Desde la honda rabia que me cabe en este cuerpo, hoy demando la aparición con vida de los 43 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, Y me gustaría terminar con unas frases del manifiesto zapatista:

“Nuestra lucha es por hacernos escuchar, y el mal gobierno grita soberbia y tapa con cañones sus oídos.
Nuestra lucha es por el saber, y el mal gobierno reparte ignorancia y desprecio.
Nuestra lucha es por la vida, y el mal gobierno oferta muerte como futuro.
Nuestra lucha es por la paz, y el mal gobierno anuncia guerra y destrucción.


Para el poderoso nuestro silencio fue su deseo. Callando nos moríamos, sin palabra no existíamos. Luchamos para hablar contra el olvido, contra la muerte, por la memoria y por la vida. Luchamos por el miedo a morir la muerte del olvido.”






jueves, 6 de noviembre de 2014

Estado policial, represión y memoria. Ayotizi VIVE!! La lucha sigue!!.*

La lucha no culmina con la detencion de los Abarca, sino hasta que caiga la cabeza de Peña Nieto.

Vivimos en un estado policiaco desde el gobierno de Felipe Calderón. Su gobierno fue el inicio de la alianza policiaco-militar denominada Plan México; donde los Estados Unidos inyectan millones y millones destinados a tecnología, armamento y equipamiento para reforzar los aparatos represivos del estado mexicano. El sexenio de Peña Nieto como heredero de dicha alianza, ha podido concretar las reformas estructurales y, como parte del linaje neoliberal en nuestro país ha sabido sacar redito de las posiciones ganadas por sus antecesores.

En corto, podríamos decir que mientras que de la Madrid introdujo el modelo neoliberal a México; Salinas de Gortari implantó el libre comercio en nuestro país; Zedillo a su vez, reestructuro los desajustes provocados por sus antecesores; Fox significó la legitimidad del sistema; mientras Calderón delimito la única función del Estado necesaria en el neoliberalismo, es decir, la función policiaca y militar; para finalmente concretar el modelo con el monigote de EPN.

Pero no todo ha sido miel sobre hojuelas, en el camino han debido cooptar o deshacerse de  las resistencias. Esa fue la política de Peña Nieto desde el 1 de Diciembre del 2012; miles han sido los muertos que no han salido en los medios, los presos políticos están al por mayor y las desapariciones han sido en tal cantidad como el silencio que le acompaña.

Esto ha cambiado después de las desapariciones de normalistas en Guerrero; esta vez los estudiantes tenían voz y eran reconocidos como parte de la lucha social de nuestro país, por eso los secuestraron, pero no contaban con la pertenencia con miles y miles de mexicanos que se oponen al proyecto neoliberal y con los otros más que a raíz de esto se han sumado y se han dado cuenta de las injusticias de los de arriba.

Compañer@s tod@s, las desapariciones de normalistas es otro de los claros intentos del régimen por borrar nuestra memoria, han querido borrar las huellas de la resistencia pero no sabían que estaban echando gasolina a un fuego ya encendido. No podemos permitir que esto vuelva a suceder, no podemos decir que el dos de octubre no se olvida cuando nos matan y nos asesinan por querer un país diferente al de los tecnócratas neoliberales.

Trataran de intimidarnos, usaran el lenguaje en los medios de comunicación, en Televisa y Tv Azteca nos dirán que ya hubo justicia que los culpables han sido encontrados y que debemos olvidar todo, regresar a nuestros hogares, a nuestros trabajos, a las escuelas y no protestar más.

Trataran de manipularnos y hacernos creer que en un estado de derecho encontraremos justicia, pero en un estado de derecho no se desaparece a los ciudadanos. Trataran de decirnos que debemos manifestarnos de forma pacífica, mientras ellos se siguen armando y utilizando sistemáticamente la inteligencia para ubicar a los disidentes.

No compañer@s, no debemos olvidar, no debemos volver a nuestras casas, al contrario debemos demostrar esta digna rabia, salir a las calles y gritar que se vayan todos. En el camino debemos parar las escuelas, los trabajos, las instituciones, demostrar que el país se mueve por nosotros no por los malditos partidos políticos que aprobaron las infames reformas.

Debemos paralizar al país e ir construyendo uno nuevo, sin la politiquería de los de arriba, sin las infamias del congreso, sino uno para todos. Hoy debemos recordar que esto no solo les sucedió a los compañeros normalistas de Ayotzinpana, también ocurrió en Tlatelolco, en Acteal, Aguas Blancas y seguirá pasando día a día mientras existan personas allá arriba gobernando, mientras existan policías y militares patrullando las calles.

Porque vivos se los llevaron y vivos los queremos. Que se vayan tod@s, que no quede ni un@ y que no regresen.

*Palabra leida en el meeting al final de la marcha del 5 de noviembre de 2014.


lunes, 3 de noviembre de 2014

¿Qué quieres de mí?


Mira j´ija sanguijuela que se pega al erario pa' chupar hasta reventar.
De ti no quiero nada, nada solo tu ausencia y en tu partida no quiero que dejes ni tu sombra.

¿Que qué voy a ser/hacer sin ti?
¡¡Seré feliz!! y ya con eso es suficiente para empezar bien el día, pero no solo eso, tengo muchos planes, muchos sueños que realizar que haré feliz cuando dejes de estar chingando, cuando dejes de estar matando mi tranquilidad.
La verdad es que ya empecé a hacer mis cosas sin ti, desde hace mucho que no estás en mis planes y créeme que avanzaré sin ti.

¿Cómo te voy a olvidar?
Cuando dejes de estar en todas partes,
si en cada novela estás tú,
en cada tele estás tú,
en cada recibo estás tú,
en cada masacre estás tú,
en cada injusticia estás tú, en cada injusticia estás tú,
¿así cómo te voy a olvidar?
¡Así, no! Sino hasta que te vayas,
¡más bien hasta que logremos sacarte y no dejes ni tu sombra!

#FueraPeña
#QueSeVayanTodos


viernes, 31 de octubre de 2014

Carta a lx incautos… O de cómo las desapariciones de los normalistas no pueden separarse de la lucha contra las reformas neoliberales, la represión, la imposición de EPN y la lucha total contra el sistema.


Los días pasan y las discusiones se avivan, los comentarios surgen al calor de las manifestaciones y muchos jóvenes de la “pseudo-intelectualidad” pos-moderna y desencantada lanzan comentarios como: “no van a lograr nada”; “el estado mexicano es invencible”; “la revolución es imposible; “las manifestación solo son desfiles bien portados”; “no todos somos Ayotzinapa, bola de nacos”; o la que más ha provocado discusión , “no entiendo por qué en las marchas tenemos que mencionar las reformas neoliberales cuando la marcha solo es por los desaparecidos”.
Como sea, nosotros pensamos que es imposible prever las consecuencias de una lucha, afirmar la omnipotencia del estado, o la reacción de una multitud al calor de un acontecimiento como el de Ayotzinapa. De igual manera, pensamos inútil enfocarnos en cambiar las opiniones de quienes se encuentran atravesados por una mentalidad hiper-individualista, consumista y nublada por la simulación de la cultura virtual.
En su lugar, preferimos sentir y pensar que no somos los únicos en este mar perverso de servidumbre voluntaria y que no estamos solos al levantar la voz y expresar nuestra voluntad contra las injusticias que comete el Estado mexicano. Nosotros decimos, que no sabemos quiénes son nuestros aliados en esta lucha y que se necesita una tormenta social como la que hoy vivimos para descubrirlo. Que podemos auto-organizarnos para extender la lucha y realizar una crítica total y entusiasta a nuestro actual modo de vivir que se ajusta a las perversidades del sistema.
En este sentido, ver la desaparición y asesinato de normalistas en Guerrero como un hecho aislado y sin relación con lo que sucede en el país, se disuelve ante su propia debilidad reduccionista y reflexiva.
A estas alturas debemos advertir, que por muchos años los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidoro Burgos” se han puesto de lado del pueblo y han practicado una verdadera educación científica, gratuita y popular. Además, estos luchadores de la Normal Rural han demostrado a partir de la acción directa, su aversión total ante el sistema capitalista neoliberal y el Estado mexicano
Así mismo, los compañeros constituyen un brazo poderoso de la lucha social en nuestro país; brazo que se ha opuesto a las reformas neoliberales, tanto en la educación como en los energéticos y, las otras que se han orquestado desde la imposición de Peña Nieto.
Es por eso que los asesinaron y los desaparecieron, no porque en Guerrero haya un vacío de poder como pretenden hacérnoslo creer los medios de propaganda como TELEVISA y TV Azteca. Sino porque este es el móvil represivo de este narco-gobierno, mismo que institucionalmente viste de policía y militar, pero que extiende sus tentáculos hasta lo más recóndito de los carteles del narcotráfico para utilizarlos como brazos paramilitares de represión y terror clasista.
Es un error pensar que un hecho particular como los desaparecidos de Ayotzinapa, no guarda relación con otras fechorías e injusticias que se cometen en este país. Sin embargo, creemos también que parte del éxito de este sistema político y económico consiste en lograr mantener el holograma de la separación y la particularidad de los hechos. En base a ello, han logrado que creamos que nos encontramos divididos en categorías como la de estudiante, obrero, ama de casa, homosexual, inmigrante, etc.; mientras allá arriba actúan en consenso con una clara conciencia de su condición de clase dirigente.

Por el contrario, creemos que el éxito de nuestra protesta debe radicar en la capacidad de hacer una crítica coherente de las canalladas que están sucediendo; en la capacidad de hacer relaciones entre las cosas, para comprender al sistema que las produce, y a su vez los efectos particulares del poder: como las desapariciones; los despojos; la progresiva precarización de la vida; la represión; la disminución de los planes de estudio; el deterioro ambiental; etc., etc., etc. Así mismo, en la superación de los roles y obligaciones bajo los cuales el sistema nos tiene dispersos y separados. 

miércoles, 29 de octubre de 2014

Encapuchad@s y sin violencia


Encapuchadxs realizan actos de desobediencia civil y develan el caracter reformista y timorato de los partidos politicos seudo revolucionarios.

Encapuchad@s y sin violencia realizamos acciones de desobediencia civil.

Encapuchad@s y sin violencia pegamos a lo largo de la marcha nuestro mensaje, ya que los medios de comunicación solo repiten las líneas dictadas por el gobierno. Nosotr@s tomamos cada muro y espacio en las calles para que nuestra palabra sea escuchada, las cámaras, micrófonos y cada diario son suyos, están comprados, las calles son nuestras y las haremos gritar ¡resistencia!, el rostro de Emiliano Zapata clamando justicia no puede ser vandalismo.

Encapuchadas y sin violencia bloqueamos las calles, por que la cotidianidad del día a día no puede seguir igual, los carros no deben seguir corriendo y la gente caminando, sin ver, sin escuchar, sin pensar, que nos están matando cada día, que nos están robando cada día y que cada día es otro igual que el que paso. Que la policía se detenga, que se quede atrás, lejos de nosotr@s, no los queremos a nuestro lado, no los queremos ver, los despreciamos, no los queremos por que en cada policía corrupto yace un asesino como los que dispararon contra nuestros  compañeros en Ayotzinapa.

Encapuchad@s y sin violencia tomamos el escenario y los micrófonos del concierto organizado por la UABC, porque la universidad es publica y no privada, es nuestra y no de las autoridades universitarias; porque en la universidad no hay democracia y su rector es acusado de especular con los fondos de lo que considera su universidad, su negocio a través del cual vende proyectos millonarios a la iniciativa privada y al gobierno quien le compra a la UABC lealtad y obediencia con esos contratos. Queremos decirle a las autoridades universitarias que su represión y su soberbia solo provocara más rabia que les explotara en las manos.

Encapuchad@s y sin violencia sentenciamos que ¡Peña Nieto va caer, va caer, va caer, Peña Nieto va caer!

Encapuchad@s y sin violencia rebasamos a los pretenciosos líderes, que pretendían dirigirnos, controlarnos, quienes con sus aburridos discursos y sus arcaicos métodos de lucha solo ahogan el poder de acción de las masas; nos mostraron una máscara bonita pintada de democracia y en la práctica mostraron que pretenden ser la voz a la que el movimiento tiene que obedecer. Demostraron también que se opondrán a cualquier iniciativa y propuesta que no salga de ellos mismos; al modo de López Doriga, Loret de Mola y la SEGOB nos gritaban escandalizados ¡vándalos ,violentos, anarquistas!, poco menos que terroristas, señalándonos como una especie de chivatos y de una forma más vulgar que cualquiera de los políticos del PRD, PAN o PRI. Finalmente, ante la victoria del templete tomado quisieron  montarse e ir a pedir el micrófono que los vándalos violentos habíamos ganado poniendo el pecho al enemigo.

A ellos y a los timoratos les decimos, “Cuando una ley es injusta lo correcto es desobedecer”, como decía Mahatma Gandhi, ¿ahora qué harán, acusarlo también de vándalo violento?

La pasividad es estéril, el pacifismo  es sumisión.

La paz que nos ofrecen es la paz de la miseria, la paz del opresor, la paz que para nosotr@s significa muerte. La misma que desaparece a nuestros colegas, la que roba, hace fraudes, la que prefiere militarizar al país antes que repartir los bienes de forma equitativa.

Por eso y más seguiremos desobedeciendo y gritando: ¡Vivos se  los llevaron, vivos los queremos!

sábado, 25 de octubre de 2014

¿Ciudadanistas o rebeldes?

Ciudadanistas y rebeldes en la opinion pública.
Las desapariciones forzadas de normalistas en Guerrero revelan el nivel de la guerra social que se vive en nuestro país. Por un lado, las redes de poder que atraviesan las instituciones y actúan en la sombra bajo el manto del narcotráfico, develan la organización y complicidad de la clase política con las elites económicas, los corporativos multimedia y las “guardias blancas” que se financian con actividades del crimen organizado.
Por el otro, hace evidente la dispersión que existe en las clases subalternas, quienes maravillados ante el simulacro del espectáculo televisivo y embaucados con las ideologías del consumo y el individualismo urbano, no logran vislumbrar la magnitud de la confrontación clasista que se desarrolla ante sus narices como resistencia ante el “despojo” neoliberal y el reajuste de las relaciones de poder.
No obstante, millones de mexicanos hoy se encuentran en la calle protestando y organizándose ante el actual estado de cosas, de lo cual emergen por lo menos dos estrategias visibles: las vías de la sociedad civil o el ataque. Aunque claro la realidad siempre supera el análisis frio de las apariencias, de lo cual deducimos que habrá casos en que redes resistenciales y subterráneas atraviesan ambas estrategias con la finalidad de cercar al enemigo; a esto le podríamos denominar, si quieren, resistencias híbridas, las cuales considero han sido muy visibles y presentes desde la aparición del neo-zapatismo.
Como ejemplo de agrupaciones que emergen de la sociedad civil y que expresan su repudio a los hechos de Iguala Guerrero y apoyo a las “victimas” se encuentran los comités civiles, los foros y conferencias que han surgido para entablar un dialogo con las autoridades por “el caso”; pero también las instituciones universitarias tipo UNAM o IIC-Museo UABC que han emitido un posicionamiento ciudadano al respecto; la Iglesia y sus actores divergentes como Solalinde; los propios partidos políticos y sus líderes, como fue el caso de Cárdenas, AMLO e incluso el propio PRI; etc., etc., etc.
Como contraparte se encuentran millares de combatientes que han salido a las calles para provocar el ataque y la conflictividad permanente contra el Estado, demostrando que la reivindicación por la aparición de los normalistas desaparecidos puede desencadenar y hacer evidente la violencia estructural que subyace en la relación de gobierno y gobernados.
Debo mencionar que ambas estrategias  presentan características muy particulares que en cierto momento pueden en su caso ahogar la rebeldía o permitir una ruptura a partir del antagonismo que propicie la autonomía de los propios rebeldes ante la ideología de la clase dirigente y su “Frankenstein” ciudadanista.
Por un lado, las vías de la sociedad civil permiten que el descontento fluya por los canales de protesta que ofrece el Estado, lo cual permitirá en su momento, que se ahogue la ira o se recupere la reivindicación inicial en las instituciones, con la finalidad de ejercer una dominación eficaz y sutil sobre la propia sociedad civil.
De igual modo, las opiniones o resolutivos que han surgido desde la sociedad civil permiten que se mediatice el acontecimiento y el conflicto y, que sea recuperado por la opinión pública, fabricándose así nuevos elementos ideológicos que permiten a su vez que los grupos de poder que gobiernan este país preserven su hegemonía.
No podemos rasgarnos las vestiduras ante este hecho, sino más bien develar la ideología que subyace las vías de la sociedad civil, con la finalidad de identificar en el proceso de lucha a los actores que actúan bajo dicha lógica.
Debemos advertir que bajo esta idea se encuentra una confianza liberal y demócrata de que los ciudadanos pueden presentar una resistencia al Estado dentro de los propios medios que ofrece el Estado. Paradójicamente, la finalidad del ciudadanismo pretende reforzar al Estado mediante una democracia representativa eficaz, en la que el ciudadano será el agente pasivo que terminara por supervisar el proceso de democratización.
Resulta interesante observar como a partir de los 43 normalistas desaparecidos más los asesinados, las instituciones y la sociedad civil “bien portada” intentan recuperar este hecho trágico para afinar y ajustar las instituciones políticas y los marcos de participación ciudadana.
Más interesante aún, si consideramos que los estudiantes normalistas de Ayotzinapan representan un brazo fuerte en la presente lucha social, no solo de su Estado sino del país. Y, que estos luchadores de la Normal Rural “Isidro Burgos” han demostrado a partir de la acción directa, su aversión total ante el sistema capitalista neoliberal y el Estado mexicano.
Debemos poner atención a los compañeros en lucha en Guerrero y no tomar como víctimas a los compañeros desaparecidos, sino como bandera y ejemplo de combatividad.
A su vez debemos estar atentos ante la intromisión de los medios como el Canal 66 en la UABC, el posicionamiento institucional del IIC-museo e incluso de las propuestas reivindicativas de la OPT, quienes tal vez –dándoles el beneficio de la duda- no queriendo puedan ahogar la lucha una vez más.
Vienen algunas propuestas como las asambleas interuniversitarias, tal vez un congreso universitario, o tal vez nos ganen una vez más los acontecimientos y un nuevo “trend topic” desvíe la atención del gran público hacia las luces destellantes de la simulación.

Sea como sea, debemos estar alertas e identificar los signos de los tiempos, prever la progresiva precarización que se está efectuando, incluso en la frontera, a partir de la aplicación de las políticas neoliberales; las características violentas que toma la protesta generalmente cuando viene desde abajo; la paulatina pérdida de status de las clases profesionistas; etc.  Desencadenar las pasiones populares para conocer la magia de la revuelta y lograr levantar el velo del simulacro en el que se pierden nuestras aburridas vidas, puede ser una apuesta mayor cuando nos enfrentamos ante la imprevisibilidad de las explosiones sociales; sin embargo, la tensión que logremos generar a partir de la conflictividad permanente debe contribuir a la profundización de la lucha que desemboque en la paralización de la economía y la infraestructura, la toma o deserción de los lugares de producción y distribución, pero sobre todo en el abandono de los roles sociales y las obligaciones que nos impone el sistema.